martes, 29 de noviembre de 2011

XV MEDIA MARATÓN VOLTA Á RÍA DE BETANZOS

Hubo un tiempo en el que este era un blog en el que se hablaba tanto de fotografía como de mis experiencias en las carreras populares o andainas. Desafortunadamente un buen día haciendo cosas fuera de mi alcance con la bicicleta rompí el menisco de mi rodilla derecha. Desde entonces la fotografía se adueñó por completo de Instantáneas de Fondo y otra de mis pasiones, correr, cayó en el olvido.

Ha pasado casi un año y medio desde mi última media maratón, la XIV Volta á Ría de Betanzos y desde entonces las molestias no me han abandonado. Primero en la rodilla con el menisco roto y más tarde en la otra, por culpa de una tendinitis Pata de Ganso que surgió a consecuencia de querer proteger la rodilla operada, sobrecargando de trabajo la otra pierna.

Me encanta acudir a las carreras populares, pero los problemas con las rodillas me habían apartado de ellas hasta hace poco. Primero intenté, hace poco más de un mes, acudir a la Media Maratón de Pontevedra, pero una vez pagada la inscripción tuve que renunciar a participar, pero más tarde logré completar la Carreira Pedestre de Santiago de Compostela, la más popular de todas las carreras que se celebran en Galicia, fueron solo 12kms., pero me supieron a gloria, pudiendo correr de nuevo rodeado de miles de personas con mi misma afición, pero quedaba pendiente volver a los 21.097 metros...

Este fin de semana pasado se celebraba la XV edición de la Volta á Ría de Betanzos, precisamente la última media maratón que puede correr. Quizás fuera una señal que por problemas económicos la prueba se trasladara de Junio a Noviembre, un retraso necesario para que de nuevo me encontrara en la forma necesaria para afrontarla. Pero lo cierto es que sí, esta vez pese a todos mis miedos, con molestias (físicas o psicológicas, no sé) y todo me planté el día de la carrera dispuesto a volver a correr por Betanzos. Mi objetivo era modesto, tomarme la carrera como un entrenamiento de cara a mi pretendido debut en Maratón en Coruña, el próximo 15 de Abril, de modo que quería correr a un ritmo de 5'45"/km.

Tanto calenté las rodillas y todos aquellos músculos y articulaciones de las piernas que de poco llego tarde al incio de la prueba. Tras saludar a algunos conocidos, se da rápidamente la salida...a partir de aquí, el tiempo que pasó hasta que fui consciente de que iba a correr la carrera todo lo rápido que pudiera sin lesionarme fue breve. Quizás aguanté tres o cuatro kms. intentando ir lento, hasta que me di cuenta de que por mucho que lo intentara me dejaba llevar por los demás, corriendo a un ritmo de 5'15"/km. De modo que puestos en esa texitura decidí empezar a apretar y correr la carrera casi a tope. Los primeros diez kms. de contínuo sube y baja fueron adelantando constántemente a compañeros, ya que habiendo salido de manera muy conservadora al final del pelotón, ahora recuperaba terreno sin pausa. A partir del ecuador de la carrera me tropecé con el dorsal 212 que corría a mi ritmo, y así seguimos hasta el final, disfrutando del paso por el puente del Pedrido, con sus espectaculares vistas, las engañosas bajadas siempre sucedidas de cuestas del último tercio de carrera, los últimos kms. de descenso en el que mi compañero no paraba de dar ánimos a todos aquellos corredores a los que adelantábamos...y finalmente los dos kms. finales a los que, para no variar en esta carrera, llegué casi al límite. Suerte de ir acompañado, ya que me empeñé en seguir a mi compañero de carrera y sólo gracias a él no terminé hundiéndome en los últimos metros.

Al final un tiempo neto de 1h46'06", dos minutos y medio por debajo de mi última participación en la Media Maratón de Betanzos, como siempre de mitad para atrás de la clasificación, algo más que asumido y que no me importa, ya que a estas alturas sólo compito conmigo mismo. Pero lo mejor de la carrera no fue el tiempo, lo mejor de todo fue no terminar lesionado y dos días después seguir sin molestias (al menos sin más de las habituales) en mis rodillas, lo cual hace que ahora ya empiece a pensar que en quince días toca correr una nueva media, en este caso el Memorial Adolfo Ros, la Volta á Ría de Ferrol.

martes, 22 de noviembre de 2011

Lomography Fisheye One All Black

Las navidades, época del año eminentemente consumista, se van acercando y las distantas marcas, conocedoras de que un buen pellizco de las ventas anuales se producen en estas fechas, están preparándose para tan señaladas fechas. Lomography no iba a ser menos, recientemente daba buena cuenta por aquí de la salida al mercado de sus dos últimos productos: la LomoKino y su serie de cámaras Gold Edition. Pero este año Lomography todavía tiene una nueva sorpresa que le pondrá las cosas todavía más difíciles a los coleccionistas de sus productos, una nueva variante de su serie de cámaras Fisheye, en esta ocasión la más elegante y posiblemente más bonita salida al mercado, la Fisheye One All Black.

Técnicamente todo sigue igual, lente capaz de abarcar un ángulo de visión de 170º, flash incorporado, posibilidad de multiexposición...presentada en esta ocasión en un discreto color negro que hace que aquellos que todavía no hayan experimentado con las lentes ojo de pez lo tengan bastante difícil para resistirse a esta nueva decoración de uno de las cámaras insignia de Lomography.

La nueva Lomography Fisheye One All Black está disponible desde ya mismo en la tiendas físicas o web de Lomography por un precio de 45 euros.

jueves, 17 de noviembre de 2011

Lomography Gold Edition (para lomógrafos adictos al lujo)

Bueno, en realidad no es para tanto, porque obviamente no hablamos de cámaras revestidas del tan preciado metal, símplemente se trata de una opción estética más, pero en cualquier caso una jugada que abre todavía más el abanico de posibilidades que tiene el potencial comprador que se acerca por primera vez a la lomografía, o del coleccionista obsesionado que verá en estos nuevos modelos una nueva posibilidad de ampliar el número de cámaras atesoradas.

Técnicamente estas Gold Edition no aportan nada nuevo a los modelos que customizan: Diana F+, Diana Mini y Fisheye 2. Aún así repasemos datos técnicos de las tres cámaras:

Diana F+ Gold Edition

• Dos velocidades de obturación - “N” para normal (luz/día/flash) y “B” para largas exposiciones (interior/noche)
• Dos formatos de imagen: 12 fotogramas cuadrados (5.2x5.2cm) o 16 fotogramas más pequeños (4.2x4.2cm) en una película de formato 120
• Obturador desacoplado y avance para múltiple exposiciones de la forma más fácil • Lente removible para función Pinhole
• Con rosca estándar para trípode en situaciones de exposiciones muy largas y fotografías pinhole

Diana Mini Gold Edition

• Tamaño bolsillo y ultra compacta
• Utiliza películas de 35mm y revelado estándar
• Te permite lograr 72 fotos rectangulares de medio formato o 36 fotos cuadradas en una películas de 35mm
• Exposiciones múltiples y configuración para largas exposiciones
• Rosca para trípode y cable disparador

Fisheye 2 Gold Edition

• Lente ojo de pez con un ángulo de visión de 170º
• Flash incorporado
• Rosca de zapata para flash externo
• Interruptor para múltiples exposiciones
• Configuración “Bulbo” para largas exposiciones
• “Seguro” para bloquear tu cámara y evitar disparos accidentales
• Tapa para lente y correa de mano
• Afiche, mini libro de foto “Fisheye View”, y manual de instrucciones

Sin duda habrá quién opine que estas nuevas versiones de los tres populares modelos lomográficos son una verdadera horterada, pero de igual modo muchos se verán seducidos por la estética un tanto extrema (esas cadenas doradas son absolutamente retro) de estas Gold Edition. Como se suele decir en estos casos, para gustos, colores.

Los nuevos modelos Gold Edition pueden conseguirse desde ya mismo en la tienda lomography.


jueves, 3 de noviembre de 2011

Lomography LomoKino

Los de Lomography lo han vuelto a hacer, a estas alturas no debería de pillarme desprevenido, pero lo cierto es que quedo encantado con cada nuevo producto que lanza la compañía. Cierto es que pronto te das cuentas de las limitaciones de todas sus cámaras (cosa que ellos ni niegan ni intentan ocultar), pero en cuanto a marketing los de Lomography son de sobresaliente.

En esta ocasión se han descolgado con una especie de híbrido entre cámara secuencial y cámara Super 8. LomoKino es el nombre del artefacto en cuestión y no es más que una cámara capaz de realizar hasta 144 fotogramas en una película de 35mm. Todas esas imágenes, luego visibles a través de un particular "cinexin" (de uso individual) lomográfico llamado LomoKinoScope, permite la composición de pequeños cortos de apenas treinta segundos de duración.

El aspecto de LomoKino es espectacular, basta echarle un somero vistazo para enamorarse de inmediato de este nuevo juguete lomográfico. Sin embargo no olvidemos que seguimos hablando de una cámara, de modo que vamos con sus características técnicas:

- Utiliza cualquier tipo de película de 35 mm – Realiza películas con negativo color, películas con procesos cruzados, películas con redscale y películas en blanco y negro.
- Enfoca rápidamente – fácilmente, en cualquier punto entre 0,6 m e infinito (para distancias entre 1 m y 0,6 m solamente hay que presionar el dispositivo de primer plano).
- Selecciona la apertura – Selección de apertura continua de f/5.6 y f/11 – selecciona la apertura fácilmente en cualquier momento durante el rodaje.
- Ajusta un trípode – Utiliza la rosca de trípode y prepárate para rodar.
- Ilumina tu película – Incorpora tus flashes favoritos a la zapata universal de la LomoKino – ¡Perfecto para experimentar el stop motion!.
- ¡Empieza a rodar! – Dispara aprox. de 3 a 5 fotogramas por segundo – ¡sólo tienes que empezar a girar la manivela!.
- Controla el avance de la película – vigila el display de volumen para controlar la película disponible – cuando la bandera roja en la parte superior de la cámara se dispara, significa que la película ha llegado a su fin.

Y por último, sin duda todavía más importante que cualquier característica técnica, los resultados que LomoKino puede producir:







El debut de LomoKino parece que está siendo bueno, a un precio de sólo 65 euros (esta vez Lomography no ha querido asustarnos subiéndose a la parra) esta cámara fotográfica/de video resulta un capricho asequible. Para comprarlo (solo o acompañado del LomoKinoScope) no tenéis más que pasaros por la tienda de lomograpy.